La niebla del amanecer de un nuevo día, se estanca en mi ventana, empaña mi visión y elimina el mundo a mi alrededor, entonces, quedo solo, con el goteo incesante del sereno en mis párpados, sin el relajante canto de los pájaros en mis pinos, sin la claridad del sol que penetra constantemente en mi habitación para calentar un nuevo día, amanezco en blanco, la nube espesa que rodea mi destino, el frío incrementado por los tabiques en mi techo, las lanzas de hielo que vomita la regadera, el fuego convertido en cenizas de mi chimenea, la imagen recortada en el espejo congelado, el silencio de la calle, la cortina en movimiento constante que impide mi visión, que se estanca y no permite sonido alguno, el azul y el gris se apoderan de mi cuerpo, mi cuerpo queda estático, frágil, a punto de la ruptura, mi vida tras el cristal del hielo…de repente, la espesa nube es atravesada, por un amarillo haz de luz, disipando a su paso el frío, apuñalando con su revitalizante calor el cuerpo amorfo de la niebla, los sonidos de la naturaleza reviven en mi floreciente jardín, los pájaros entonan júbilos en su trinar, el rocío del ambiente se condensa, los cristales recuperan su tacto liso y los espejos vuelven a la vida, el sol penetra en mi hogar, el agua regresa a su cause en mis tuberías, la nube de vapor se introduce en mi prisión cristalina, goteando, impaciente, devolviendo a mi cuerpo la vida, la conciencia, el calor, mis extremidades adquieren movimiento, mi sangre circula tibia en mis venas, mi corazón se estabiliza, mis dientes castañean una canción de desesperación, el azul desaparece de mis labios, mis ojos recuperan el color y la vitalidad, mis cabellos recuperan movilidad, el cuarto arde en llamas, y la luz cobra vida, los sonidos invaden mis oídos, mi visión se recupera, divisando el contorno inmaculado del fuego convertido en ser humano, es calor atrapado en ternura, es amor que revive mi calentura.
Billy Idol - Cradle of Love
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