miércoles, 31 de marzo de 2010

Caer, Rodar, Volar, Girar

Caer, rodar, volar, girar,
El cuerpo se fragmentaba, manchándose con tinta de pulpo,
Detenidamente, contemplaba la locura impregnada en su piel,
La multitud gritaba al unísono: ¡La eternidad no dura más que un instante!
Mientras se desdibujaba la imagen imaginativa de la figuración.

Caer, disimulando la sobredosis,
Rodar, sumergiéndose en lágrimas turbias,
Volar, internándose en las profundidades de su mente,
Girar, viviendo en un caleidoscopio demente.

Caer, rodar, volar, girar,
El péndulo giraba, dejando de oscilar mientras su alma se desvanecía,
Ahogada en las profundidades del mar caspio, desprovista de libertad,
Ignoraba el pago del peaje, zigzagueaba entre meandros y recovecos
Que ocultaban su rastro incoherente en el mar.

Y había un Dios que se escondía e ignoraba la situación,
Caía en cuenta que la rueda de la fortuna no paraba de girar, volando hacía la eternidad,
Y a su vez, existía su contraparte, expuesta y enterada del descontrol,
Signos inequívocos del cuerpo que desciende al vacío inminente.

Caer, imaginando dioses,
Rodar, completando ciclos,
Volar, fantaseando con volver al cielo,
Girar, en la tornamesa del destino, infinito peregrinar.

viernes, 26 de marzo de 2010

Histerético

Por fortuna, aún conservaba el brillo en sus ojos. Ese brillo de vida que emana de la visión del alma de cada individuo al salir a la superficie luego de pasar una temporada atrapado en la obscuridad de la cotidianeidad. Su semblante translúcido hacía frente a la tormenta, todo se revolvía entre la dicha y la adversidad. Su alma vencía al miasma que se apoderó de su esencia.

Sus pasos se dirigieron hacia un punto en el horizonte donde su perspectiva mutó. Contempló al cielo convertirse en hielo y al mar ser reemplazado por polvo y gas. Su cuerpo se trasladaba simultáneamente con los cambios en su entorno; el punto del no retorno, nada era lo que fue y todo será como jamás se contempló que fuera. Los grandes engranajes del universo se volvieron a poner en funcionamiento, como si el Dios de los cristianos se despabilara de su utopía.


Su voz, carente de traducción, denotaba un dejo de ironía. Los estímulos que lo impulsaban, palpitaban descompasados en su interior. El caracol del tiempo se deslizaba por los surcos de arena, todo a su alrededor se compactaba y al instante explotaba. Y a lo lejos, una explosión resquebrajó los cimientos de su antigua civilización. Lo dejó todo atrás, pasado y recuerdos, personalidades y eventualidades, todo se transformó y sucumbió ante él.


A final de cuentas, todos somos creadores en nuestras propias mentes. Y en la suya, la metamorfosis dominaba la histéresis de lo que alguna vez quiso ser.

jueves, 25 de marzo de 2010

Descubrí un Mar Debajo de tu Falda

Descubrí un mar debajo de tu falda,
Un sabado a la medianoche,
El manto de estrellas impregnadas de ti
Era tan solo un rumor,
Rubor de la brisa que devoraba tu nombre.

Sube nube, desciende fuego,
La estrella que me devora explota en tu interior,
Recordar, es vivir, viviendo en un sueño sin tiempo,
Sin ser más que un cuento de hadas sin censurar,
Al calor de dos astros en la bajamar.

Ondulante, el oleaje no paga pasaje,
El mar se abre camino por los recovecos de mi locura,
Tu cintura, libro novel de mis disparatadas aventuras,
Se sumerge en el espejo soluble de mis ansias reprimidas,
Reflejos que se antojan impenetrables, oleaje sin equipaje.

La luz del tiempo luce opaca en la distancia,
Soltar las velas y zarpar,
Luces que deslucen en la superficie de la oscuridad,
El reflejo del firmamento en el espejo de Poseidón,
Descendiendo...directamente hacia el mar.

miércoles, 24 de marzo de 2010

¿Where's Metrópolis?

¿Ordenándose como Sacerdote?...¡¡¡¡Dios me libre!!!!
¿Perdiéndo la Razón en alguna boda Oaxaqueña?...Mmmmm muy probable ¿Sufriendo en Cancún?...¡¡¡¿¿¿Porqué los sueños bellos sólo duran un Fin de Semana???!!!
¿Evaluando Edificios Dañados en Chile?...¡¡¡10 días al Máximo!!!