Sin palabras, en total silencio,
Caigo, un simple descuido…y caigo,
Oscuridad por arriba, por abajo, me comprime,
Mi cabeza da vueltas buscando la razón, la gravedad es incesante.
Mi cuerpo cansado, el esfuerzo y la desesperación del vacío,
Y caigo, simplemente mi cuerpo se entrega al poder de la gravedad,
No sé cuándo va acabar el descenso, mi mente busca una razón,
Mi cuerpo cede a lo que el magnetismo concede.
Un segundo atrás, pisaba en lo macizo, en tierra segura,
Un segundo después, todo es aire, todo es impaciencia,
Caigo, en el abismo, más no en la desesperación,
Caigo, me entrego a lo desconocido, encuentro la paz.
Mantenme estático, aún cuando mi cuerpo se deshace en lo dinámico,
La materia se haya en equilibrio, mi mente está en completa inestabilidad,
Rasga el velo de lo impenetrable, deshazte de lo aprendido, entrégate a lo desconocido,
Manda tu mente a tierra firme, deja tu alma con tu cuerpo…cayendo.
El abismo no tiene límites, es un recorrido largo y asfixiante,
La oscuridad es tan densa, o es que acaso no he abierto los ojos en el descenso,
Una luz brilla, será el fondo o estoy de vuelta en la boca del hoyo,
Tú decides, caes a lo desconocido o te quedas sobre lo seguro.
Caigo, la experiencia, aunque extraña, es placentera,
Abre los brazos, cierra los ojos y disfrútalo,
Aprende que no todo en esta vida es seguro, dale espacio a algo nuevo,
Cierra los ojos, abre el corazón y sacia el alma.
1 comentario:
eah
saludos compa
www.e3colectivo.blogspot.com
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