sábado, 9 de agosto de 2008

Crónicas Campechanas 2: Bailando Sobre el Barco del Capitán Lafitte's


Jueves 7 de Agosto.- un día excesivamente tranquilo, no hubo labores en la oficina a causa del informe de gobierno, estuve tirado toda la mañana en la cama, viendo 2 episodios de Roma, escuchando música, y paseando un rato en la camioneta buscando que desayunar, las ganadoras fueron unas 4 gringas en un puesto de mis favoritos en la ciudad, soy cliente frecuente cuando ando por aquí…la tarde pasó muy tranquila, me encerré en el cuarto de mi hermano para escuchar en su estéreo los últimos dos discos de los Babasónicos, y viendo a través de la ventana como caía un diluvio torrencial…una tarde dividida entre mi soledad y mi familia…por la noche, me habló uno de mis mejores amigos y me dijo que si iba con él y su novia al Restaurante Bar Lafitte’s del Hotel del Mar, noche de jueves, noche de salsa, noche de sorpresas y noche de cervezas…llegamos a las 11 de la noche, pedimos nuestras respectivas bebidas, y una muy rica botana, unos dedos de queso y una botana mexicana, que consistía de quesadillas, tacos dorados, garnachas, frijol y guacamole…la música comenzó, la pareja con la que llegué se dirigieron a la pista, mientras que yo me quedaba un momento en la mesa platicando con una amiga, hasta que inició una tonada muy conocida por mi y mis piernas, y como por arte de magia, el cuerpo se me comenzó a mover, y nos dirigimos en dirección a la pista de baile, a disfrutar de un sinnúmero de vueltas y acrobacias propias de la salsa, más cuando se quiere sorprender a la pareja con pasos sacados por debajo de la manga, y así, transcurrió la noche, entre XX, y unos cuantos cigarros, entre el zapateo los volantines y unos cuantos “tacos de ojo”, la parranda transcurrió hasta las 3 de la mañana, nos despedimos en el lobby del hotel y como dicen: Aquí se rompió una tasa y cada quien a la chingada…una noche más de fiesta en la ciudad, aquí soy un vampiro, duermo todo el día y por las noches las baterías recargadas y el entusiasmo por la fiesta a todo lo que da…¿Por qué será que me cuesta tanto trabajo ser sociable en Puebla?

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