viernes, 9 de septiembre de 2011

Hablemos del Amor sin Poesía

Amor, palabra/sensación tan temida,
y a la vez, tan enaltecida, cursilerías del idioma, 
¿Qué son los sentimientos si no pueden traducirse en palabras?
-añádale en éste espacio, el lugar común de su preferencia-
-agregue otro aquí, y en el siguiente párrafo, también-;


Hablemos del amor sin cursilerías,
tal cual es: Crudo, latente, demente,
al rojo vivo y en sus entrañas;


Dejemos de lado todo aquello
acuñado en nuestras infancias,
fantasías de príncipes y princesas;


Despertemos a la madurez de tiempos compartidos,
de sueños divergentes y realidades convergentes,
realidades de venusinas y marcianos, ambos terrestres;


Digamos que el amor es mortal,
que las palabras se las lleva el viento,
y las acciones no las arrastra ni el mar;


Pongamos que el amor es un invento,
una estrategia para hacernos mirar al cielo,
y descubrimos que lo divino se pierde al primer intento;


Hablemos que el amor es una pregunta retórica,
a una respuesta neutra y sobria,
que tú eres la interlocutora y yo, no me dejo intimidar;


El amor, es el camino directo a Roma,
se encuentra sin preguntar,
y se enciende cuando la pasión se desborda.

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