Anoche escuché algo muy cierto en la televisión…”El Hombre no puede ser un ente solitario, por naturaleza necesita la compañía de una o más personas, es sociable por naturaleza, pero la soledad de vez en cuando es maravillosa”…no recuerdo bien qué veía ni menos quien lo dijo, pero me gustó, y hoy en la mañana decidí no desayunar solo en mi casa, así que fui a la cocina económica donde diariamente como por las tardes…me hacía mucha falta ese desayuno con ambiente hogareño…me hizo extrañar esas mañanas en que madrugaba en mi casa paterna y desayunaba en compañía de mi madre que gustosa me preparaba mi desayuno, cosa que normalmente no ocurre pues cada quien tiene sus horarios de actividades y como en muchos casos no concordamos, pero cuando eso ocurría, era una experiencia maravillosa…tomar un cafecito y acompañarlo con pan dulce recién comprado, no por eso debe de ser recién salido del horno (jejejejejeje), en compañía de la creadora de tus días, es algo muy agradable…algo muy entrañable…lo que daría por que no pasen muchos días para que se vuelva a dar…no estoy triste pero la melancolía por el hogar, por el nido, por esa infancia que nunca más volverá, pero que se disfrutó de maravilla, ese sentimiento es algo por demás hermoso…el ave quiere volver al nido por una corta temporada.
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