domingo, 10 de agosto de 2008

Crónicas Campechanas 3: Comenzando en Mérida con las Coyote Ugly, Jugando al Inca Sun y Bailando en el Bar Río

Viernes 8 de Agosto.- un viaje inesperado, pero necesario, nos fuimos a Mérida en familia, simplemente para llevar a mi madre a una reunión con un Notario de por allá, mientras mi padre y su servidor servían de guardaespaldas, al menos durante el viaje, porque durante la entrevista, mientras esperábamos que saliera mi señora madre, mi papá y yo nos fuimos en busca de una cantina donde podamos abrir el apetito, Mérida se caracteriza demasiado por contar de cantinas o bares botaneros, donde las botanas (valga la redundante redundancia) son una multitud de antojitos típicos de la región, éste bar en particular, contaba con el incentivo extra de ser un bar estilo Coyote Ugly, con un par de enorme barras, muy bien acondicionado, que de cantina no tenia nada y de bar de calidá mucho, las muchachas, de a dos por barra no eran de mal ver, y eran muy agradables, jóvenes, señores y viejitos eran atendidos con una muy agradable y honesta sonrisa (a algunos hasta de beso los saludaban, buenos parroquianos), en fin que después de 3 rondas de cervezas (Pacífico, por supuesto) y una suculenta selección de platillos exquisitos, nos habló mi madre para ir por ella, según para ir a comer, pero decidimos quedarnos ahí, y seguir comiendo de esos manjares típicos (y 100% recomendables, de cualquier cantina o bar de la ciudad de Mérida…el nombre de éste se los debo!), me quedé esperando que mi padre fuera por mi madre, mientras tanto pedía otra ronda a nuestra hermosa bartender…después de 3 cervezas más y con el estomago a reventar de kivis, papatzules, relleno negro, tamales, tacos dorados, y harta verdura, entre muchos otros platillos, nos dispusimos a emprender la graciosa retirada…retirada que no se dio, a mis padres se les antojo ir a gastar unos $200 a un pequeño casino, jugando máquinas traga crédito ahí tardamos unas 3 horas pues al parecer el trío traía mucha suerte, a final de cuentas la ganancia sólo fue de $50 pero la diversión en familia fue más que garantizada (a final de cuentas, lo que importaba)…salimos de Mérida a las 7 pm, yo maneje de regreso entre una carretera abarrotada de tránsito, y los últimos kilómetros bajo una molesta lluvia, llegamos a las 930 pm, directo a cenar unos “Vampiros” (Sonora Style), posteriormente, un bañito de agua tibia y sin la intención de salir bien vestido, me puse las primeras prendas que tenía a la mano, un pantalón oscuro y una camisa verde, mis zapatos café y unas cuantas gotas de perfume (soy fanático del Lacoste Rojo) y directo al malecón, la idea: unas vueltas, encontrarme amistades y charlar “sanamente” hasta ciertas horas de la madrugada…la realidad fue otra, no tenía ni 10 minutos de haber salido, cuando recibí una llamada, “Vamos a tomarnos dos cervezas como la gente decente”, ok, fui por mis amigos y nos armamos en su casa con la primera lata de cerveza, y a emprender el recorrido por el malecón de la ciudad, Bar Río la opción unánime, un huevito, pero el antro de moda entre las jovencitas campechanas, (noche de solteros!)…los dueños son muy buenos amigos de la infancia, que hacía mucho no veía, nos consiguieron un muy buen lugar, justamente en medio, amplia visión de ataque, y muy buenas victimas alrededor (lo que después no me quedó claro fue, quién fue la victima y quién el cazador)…las supuestas dos cervezas como la gente decente, siempre ha sido un preámbulo de una noche larga y llena de descontrol etílico y ligue seguro, así que durante sesiones de reggeton (Sic! Sic! Y Recontra Sic!), un rico hip hop, una sesión de salsa (para no perder la costumbre) y una sesión de Rock en vivo, donde simplemente los grupos de Cover de mi tierra son la demostración de lo viejo que ya estamos a nuestros 28 años, al coverear pura canción antigua las cuales bajo el influjo del alcohol, hasta luego luego uno se siente un Benny Ibarra con su trajecito azul, o se siente Chava de Coda, e inclusive hasta me sentí José José bajo drogas cantando La Nave del Olvido en una versión ska muy agradable…amigos y amigas que hacía muchos años no veía, amigas nuevas (victimas que se convirtieron en victimarias), diversión garantizada cuando salimos Pedro, Ayax y su servidor, una noche 100% llena de diversión, nos juntamos con 2 mesas repletas de mujeres, (incluidos dos tipos que supuestamente eran los novios de algunas de ellas, el chiste es que terminamos con nuevas amigas en la agenda…salimos a las 4 de la mañana directamente al puesto de Don Chente por unos perros de salmonela cubiertos por tocino de tifoidea, y directo a dormir porque supuestamente al día siguiente teníamos juego de softbol a las 9 de la mañana, sobra decir que el marcador fue de 13 a 8, favor mi equipo, yo jugué las 7 entradas completas, bajo un sol criminal, y una cruda espantosa, pero por los acontecimientos, valió la pena el desvelo…el sábado, por obvias razones fue un día muy relajado, al llegar del juego me pasé toda la tarde y noche dormido, hasta las 11 de la noche que salí a dar una vuelta ya cenar, y a guardarme temprano, no es lo mismo los 3 mosqueteros que 20 años después.

Flo' rida & T Pain - Low

2 comentarios:

Rose dijo...

hmmm yeah it seems to me you had great time imagine that drinks,dancing and new phone numbers plus new girls what more can a guy want rigth? what more? well glad you had fun and interesting adventures.

xoxoRose

Rose dijo...

nombre esas una rola bien chida mejor dicho when i hear it all i want to do is get low an skake my ass wooorales!! chido el gusto eh.