sábado, 10 de noviembre de 2007

Peripecias de un Viajero...Varado en la Terminal de Merida


A punto de iniciar el regreso a “casa”, a mi cueva, a mis estudios…estuve a punto de no partir, es que de plano tengo una memoria de teflón, nada más no se me pega nada…todo listo, mi ropa, mis perfumes, cepillo de dientes y rasuradora…mi herramienta clave, o sea, mi laptop también guardada, mis discos creo fue lo primero que guarde…por cosas de la vida he resultado muy distraído, y hoy se reflejo, MI PINCHE BOLETO SE ME QUEDÓ EN MI CUARTO!!!, y ya teníamos media hora en carretera rumbo a la ciudad de donde voy a salir rumbo a Puebla…se armó la revolución, dos semanas estuvo el muerto arrimado en su casa y nunca apestó, nunca fue regañado, fue el rey, fue la primera mentada de madre en su honor y fue como estar en casa a fin de cuentas, no me sentí de visita a mi salida…por suerte el avión tiene un par de horas de retraso por causas ajenas a la aerolínea, al menos que hayan comprado una máquina de las que usan en los antros para recrear la neblina…ya perdí mi clase de hoy viernes a las 5 de la tarde, si vieran como estoy sufriendo se sorprenderían al verme de lo más relajado del mundo, eso de romper la rutina de trabajo y obligaciones durante dos semanas afecta un poco en el ánimo y el desempeño de la gente, aunque es sólo cuestión de días para recuperar el estilo de vida, volver a montar la escena dramática de vivir en la más abrumante soledad, y empezar a contar con un viejo ábaco de piedras imaginarias los días que hacen falta para volver a verte, y volver a sentir tus labios…me siento como un actor a punto de montar su personaje, buscando en su cabeza algún recuerdo triste y se me quite de la boca esa sonrisa que tengo desde hace varios días, creo que esta vez no conseguiré el papel del amargado…para acabar de fregarle la existencia a mi mugre subconsciente, este fin de semana hay Ley Seca en la ciudad de Puebla, jornada electoral, que culpa tenemos los jóvenes civilizados de que haya ciertos sectores de la población que no saben controlar sus emociones reprimidas durante el transcurso de los periodos gubernamentales y exactamente durante estas temporadas se desplayaban y se querían linchar entre reproches a los políticos que como buenos engendros del mal “sólo salen de noche y en elecciones”, se les hace más fácil imponernos el CERO ALCOHOL, mientras llegan a guarecerse en sus nidos al terminar las contiendas…tengo muchas cosas en mi cabeza, cosas buenas y cosas malas, reflexiones, que a falta de esos momentos de soledad no han podido ver la luz de la pantalla y ser impresos con pelos y señales como han sido concebidos en mi cabeza…estamos a punto de salir rumbo a la cueva, ahí habrá tiempo de sobra mientras me tomo un descanso de mi protocolo de tesis y me sumerjo en los placeres que sólo el escribir ha brindado a mi existencia.

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